En un partido marcado por la violencia antes y después del encuentro, Peñarol perdió 1-0 frente a Rosario Central y uno de sus futbolista, Maximiliano Olivera, terminó en el hospital como consecuencia de una agresión con una piedra que lanzaron desde la tribuna del equipo argentino.
Tras finalizar el partido, los jugadores de Peñarol se acercaron a saludar a sus hinchas y en ese momento Olivera fue agredido, que le provocó un corte en el rostro y un gran sangrado.
Luego de la agresión, el jugador quedó tendido en el suelo.
Segundos después se repuso e intentó ir a buscar a la tribuna a quien le lanzó la piedra.
En ese momento fue detenido por sus compañeros y atendido por la sanidad.
Tras llegar al vestuario, Olivera fue trasladado a un sanatorio para realizar estudios.
Antes de la medianoche de este jueves se integró a la delegación en el hotel y dejó un duro mensaje en sus redes sociales: “Estoy bien! Gracias por los mensajes! Más allá del dolor y unos puntos de sutura, todo bien! Dolido por el resultado que creemos merecíamos algo más. Pero con mucha bronca por el pésimo trato que recibió nuestra hinchada, nuestra gente. Una VERGÜENZA! Pero todos juntos, vamos a dar pelea en todos lados! Peñarol y nada más. Esto sigue! Vamo y vamo”
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