Por Enrique Otero
Desde el Ejecutivo se piensa que los ingresos "altos" del Estado parecen que son donados y no se han logrado por acceder a cargos de responsabilidad, por estudios realizados, por cargos concursados (no a dedo) y que menos se valora el trabajo bien realizado. Pues si el trabajo sale, es por gente que dignifica respondiendo con su trabajo y a su sociedad y, por tanto, a su empleador.
Es verdad que podemos tener un trabajo más estable, pero no se nos regala nada, se nos remunera y como contrapartida a la estabilidad, muchas veces por debajo del ámbito privado. Es de destacar que el impuesto coronavirus, un impuesto solidario, no contempla los gastos fijos que tiene el aportante. Hipotecas, retenciones alimenticias (si es el caso), alquileres, y los servicios en general (salud, UTE, Antel y todos los que todos conocen).
Cuando uno llega justo al pago de todos los gastos (algo habitual al trabajador que primero paga sus deudas para ver cómo manejarse en el mes) llega un impuesto, no para salvar y ser solidario con nuestro prójimo, sino para que al Sr. estado le cierre su caja, sin tener en cuenta que genera a los aportantes situaciones de tener que bicicletear deudas o pedir préstamos para que no suceda. Pues no se consideró que después hay que pagar intereses por los mismos.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá