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Combustibles congelados en noviembre: ¿había margen para una baja de tarifas?
El Poder Ejecutivo resolvió está semana congelar el precio de los combustibles durante noviembre, después del aumento que había regido en octubre.
Con ello el precio máximo de venta al público para la nafta Súper 95 se mantiene en $ 77,54 por litro. En tanto, el precio máximo del gasoil 50S también queda en $ 59,39 por litro en el surtidor.
¿Había margen para una baja de las tarifas? Las cifras oficiales basadas en el Precio Paridad de Importación (PPI) que publica Ursea, muestran que si se aplicaba esta regla la nafta debía abaratarse y el gasoil debía subir.
Tras el último decreto del Poder Ejecutivo, los ingresos de Ancap por litro de Súper 95 quedaron $ 1,94 por encima del PPI, mientras que el ingreso por cada litro de gasoil comercializado quedó $ 0,16 por debajo del PPI.
PPI Ursea versus importaciones reales
Sin embargo, hay que tener en cuenta otro elemento que ha cobrado importancia al estar la refinería de La Teja sin producir por parada de mantenimiento.
Los precios reales de las compras de combustible que Ancap pagó en los mercados internacionales -para suplir la falta de producción propia-, han sido más caros que los costos teóricos calculados por Ursea para el producto importado hasta Uruguay y transportado hasta La Teja.
En ese contexto, la referencia PPI no es el único elemento de precio que se tomó en cuenta en esta oportunidad por parte del gobierno. Según supo El Observador, en el informe financiero mensual que Ancap envió al Poder Ejecutivo previo a la decisión tarifaria, incorporó datos respecto a los sobrecostos que ha tenido que pagar en las importaciones realizadas durante agosto y setiembre.
Como informó El Observador, Ancap estimó que las pérdidas fueron de unos US$ 2,9 millones en las primeras siete compras de nafta y gasoil que se realizaron en el exterior, por un volumen de 173 mil metros cúbicos.
En Ancap sostienen desde hace tiempo que la metodología de cálculo que utiliza el regulador no refleja los costos reales que tiene importar. El ente ya había constatado las diferencias en importaciones de nafta y gasoil que había realizado de manera esporádica en el transcurso de 2021, 2022, y también en los primeros meses de 2023.
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